"Cada materia cuenta la historia de nuestra existencia y transmite su energía”.

Correo electrónico: mirielarte2009@gmail.com

Estudios Realizados en: 1989 - Escuela Vocacional de Arte. Holguín. 1993 - Escuela Profesional de Arte. Holguín (Graduada de Artes Plásticas, Tejeduría Artística y Diseño Escenográfico) 2008 - V año Licenciatura en Comunicación Social.

Premios- Premio de la Ciudad 1995. (Holguín)- Premio UNESCO 1999. (Oficina Regional para Latinoamérica y el Caribe)- Premio IBEROARTE 1999. (Holguín)- Premio FIART’99- Premio La Barraca. 1999. (Teatro Nacional de Cuba)- Premio Venga la Esperanza de la AHS. (2003).- Premio a la Maestría Artesanal. 2008. (Fondo Nacional de Bienes Culturales) Premio Manos. 2010.

Menciones- Mención Salón de Escultura 1993. Sala Electa Arenal (Holguín)- Mención Salón Provincial 1994. (Holguín)- Mención Salón Provincial 1995. (Holguín)

“Soy madre de tantos seres que andan por ahí esparciéndose entre los hombres. Son pequeños objetos en fusión con la naturaleza y mi ser.
Desde los inicios el hombre creyó en la idea de un principio vital que da vida y anima a los objetos y seres vivos de este mundo. Un poder intrínsecamente formado en los objetos mágicos, una sensibilidad que les impone a estos un carácter humano.
Reciclando todo esto parto de mi propia filosofía, mis sensaciones ante la obra, ante el momento de creación, es cuando siento que la obra se carga de energía, transmito mi esencia, tal como alguna vez lo hizo la sabia en vida de la planta. Tantas “cosas” andan por ahí entre creencias y métodos de diferentes sociedades que aún son estudiadas.
Crear es un estado emocional, una comunicación espiritual, una necesidad espontánea, es el lenguaje del artista, es una emisión de energía que necesita canalizarse y representarse. Cuando esto sucede nace lo mejor de mí, los sentimientos y las esperanzas más sublimes, en un estado de gracia que es preciso perpetuar y transmitir a tantos seres que viven olvidados de sí, de la tierra, de la esencia de la vida. La humanidad, el planeta, sufren por la indiferencia ante la vida misma, ante el presente y el futuro.
Es necesario hacer recordar que la mayor fuente de vida y placer está en la naturaleza, hacerla presente invadiendo el espacio de aquellos que a menudo la huelen, la saborean, la palpan, incluso si la miran no la ven y han perdido las disposiciones necesarias para la conciencia de su existencia, no se detienen a observar.” Miriela.